Cuando llegan los tiempos de crisis, los mismos llegan y se quedan para trasladarse a todos los ámbitos. En este caso Bankia ha decidido apretarse todo lo que pueda el cinturón en el día a día para ahorrar lo máximo posible en estos tiempos difíciles.
Luego de los diferentes recortes en la factura eléctrica con la regulación de calefacción y aire acondicionado y de la reducción del servicio de limpieza, ahoraes el turno de la cesta navideña, que tradicionalmente la entidad viene repartiendo de forma habitual en su larga historia. Dada la situación actual Bankia ha decidido suprimirla este año.
Con estas palabras se lo ha comunicado la dirección de recursos humanos a los cerca de 21.000 empleados que forman el banco resultado de la fusión entre Caja Madrid, Bancaja, La Caja de Canarias, Caixa Laietana, Ávila, Segovia y Rioja. La decisión ha generado un evidente malestar entre los representantes de los trabajadores, que ya protestaron con motivo de la salida a bolsa de la entidad, así lo ha informado El Confidencial.
En ese momento, la dirección de Bankia decidió no dar préstamos blandos a sus empleados para comprar acciones ni un descuento final sobre el precio de la Oferta Pública de Suscripción (OPS), como suele ser normal en este tipo de colocaciones.
Luego, con motivo de la celebración de la Asamblea General de Caja Madrid, Rato volvió a agradecer a la plantilla “su entrega y generosidad”. Asimismo, señaló que a 30 de septiembre han salido de la entidad 3.210 personas, alcanzando ya el 85% del objetivo señalado en las medidas de reorganización; y se ha producido el cierre de 751 oficinas, que son más de las previstas inicialmente.
Pero el presidente también recordó que es necesario reforzar la rentabilidad, eficiencia y calidad, como objetivos prioritarios. En ese sentido, anunció la implementación de nuevas sinergias que deben suponer un ahorro de costes de 134 millones de euros en 2011 y hasta 469 millones de euros en 2013; así como un plan de eficiencia adicional que debe suponer un ahorro de otros 150 millones de euros en 2013.
Es asi, que en ese contexto se enmarca una medida tan poco popular como la supresión de la cesta de Navidad. Algunas fuentes próximas al grupo financiero indican que esa decisión puede suponer un ahorro de entre 1,5 y 2 millones de euros, una cantidad importante de dinero, que si bien por otro lado se considera que es muy poco significativa en el balance de Bankia, por otra, que suma para el objetivo final de mejorar la eficiencia.
Con la finalidad de poder compensar la pérdida de ese tradicional regalo navideño, Bankia por su parte ha decidio dar un obsequio a cada uno de los empleados en activo.
La decisión de dejar sin cesta a la plantilla no es una idea original de Bankia. La primera en tomar la medida de suprimir el aguinaldo fue la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM). Los responsables del Banco de España, máximo accionista tras la intervención pública del pasado mes de julio, han aplicado la tijera a todo tipo de gastos superfluos, como el seguro médico privado o las retribuciones en especie.